El Síndrome de Dressler fue reconocido y caracterizado por vez primera por el cardiólogo polaco Dr. William Dressler en el año 1956. Es una complicación cardíaca que puede ocurrir después de pasadas 3 a 4 semanas de haber sufrido de una lesión aguda al miocardio (ataque cardíaco o infarto). Se caracteriza por la inflamación del tejido que envuelve al corazón (pericardio), sin embargo también puede afectarse el tejido que recubre a los pulmones.
Complicación que puede llevar a la acumulación de líquido en el pulmón, lo que se conoce como derrame pleural.
Causas del Síndrome de Dressler
Se cree que el Síndrome de Dressler es una patología de origen autoinmune, producto de la reacción anormal del sistema inmunológico del cuerpo humano, el cual libera anticuerpos en respuesta a una lesión. Se ha detectado la presencia en las células sanguíneas, de anticuerpos liberados para atacar determinados antígenos de origen miocárdicos o pericárdicos liberados al sistema inmunológico durante un infarto.
También ha sido relacionado con algún tipo de infección (viral) en estado latente o con el ingreso de sangre a la membrana del pericardio cuando ocurre un infarto agudo miocárdico y se medica con anticoagulantes vía oral (se piensa en esta opción puesto que los casos del síndrome han disminuido considerablemente en los últimos tiempos debido a que estos medicamentos no son utilizados actualmente para el tratamiento de este tipo de infartos). Este disturbio también puede ser el resultado de un ataque cardíaco, de una lesión traumática del corazón o inclusive darse posteriormente a una cirugía del corazón.
Síntomas del Síndrome de Dressler
El síndrome de Dressler también se conoce como síndrome post-infarto del miocardio, post-pericardiotomía o post-lesión cardíaca. La enfermedad presenta una serie de síntomas comunes a otras patologías cardíacas, por lo cual no siempre es fácil identificar su ocurrencia.
Las principales manifestaciones clínicas del síndrome son:
- Fiebre
- Taquicardia
- ansiedad
- Fatiga
- Dificultad respiratoria
- Malestar general
- Dolor en el pecho similar al que se presenta cuando se produce un infarto, que se torna peor con la respiración y puede agravarse cuando el paciente se inclina hacia adelante, pudiendo irradiarse hacia el hombro izquierdo.
Cuando el paciente es sometido a auscultación cardíaca, puede escucharse la presencia de ruido del pericardio y cuando la auscultación es a nivel pulmonar se puede sentir la presencia de líquido en los pulmones.
Diagnóstico del Síndrome de Dressler
El diagnostico del síndrome se realiza con base en la historia clínica y por medio del examen médico, de la evaluación de los síntomas, y con la realización de exámenes que incluyen los siguientes procedimientos:
- Auscultación
- Exámenes sanguíneos
- Ecocardiograma
- Electrocardiograma
- Radiografía de tórax
Tratamiento para el Síndrome de Dressler
Generalmente el síndrome no produce complicaciones, teniendo un buen pronostico clínico. No obstante pueden presentarse dos tipos de complicaciones que son:
-Taponamiento cardiaco: en el síndrome puede suceder un derrame pericárdico, produciendo un esfuerzo más por parte del corazón, debido a la presión que se ejerce sobre el órgano, lo que reduce su capacidad de bombear sangre eficientemente.
-Pericarditis constrictiva: condición que aparece cuando la inflamación crónica del pericardio hace que se formen cicatrices. Situación que hace que el corazón también trabaje de forma más intensa y menos eficiente.
El tratamiento tiene como objetivo principal controlar el dolor y disminuir el proceso inflamatorio, involucra la administración de antiinflamatorios al paciente (aspirina, ibuprofeno o naproxeno) así como de corticosteroides en el caso de que los primeros no actúen eficazmente; normalmente se administran durante un mes aproximadamente o hasta que los síntomas sean remitidos.
Cuando existen complicaciones, se puede someter al paciente a un drenaje para eliminar el exceso de fluidos (en algunos casos extremos la cantidad de líquido puede llegar a ser tan grande que complique el funcionamiento del corazón y los pulmones, en tal situación el tratamiento es quirúrgico) y en el caso de que el pericardio esté seriamente comprometido, debe realizarse su remoción quirúrgica (pericardiectomía). El corazón generalmente es capaz de funcionar de forma normal sin el pericardio.
El síndrome de Dressler es una dolencia que puede ser auto limitada, con valores bajos de complicaciones graves, no obstante si se diagnostica debe ser tratada como una emergencia.